Alonso Cuevas fue ilegalmente detenido por el Gobierno Federal de México el 23 de junio de 2009 por ser predicador laico de una minoría religiosa en la Ciudad de México. A pesar de que aún no ha sido sentenciado por un juez, el gobierno de México lo ha condenado ante los medios de comunicación como un criminal peligroso, presentándolo como un trofeo de la Procuraduría General de la República. En realidad, Alonso Cuevas es un chivo expiatorio más del sistema disfuncional de justicia mexicano. Alonso es inocente.
¿Quién es un preso de conciencia?
Acciones a Favor
Escribe a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos solicitando la liberación inmediata de Alonso
Envía tu carta de puño y letra a la CIDH:
Comisión Interamericana de Derechos Humanos
1889 F Street, N.W.
Washington, D.C., 20006
U.S.A.
¡no olvides poner tu firma!
Comunicado de prensa
ALONSO CUEVAS Y LA INTOLERANCIA DEL GOBIERNO DE MÉXICO CONTRA LAS MINORÍAS CRISTIANAS
México DF, 28 de junio de 2009.
1. El día de ayer la PGR circuló en medios nacionales, información difamatoria sobre la detención ilegal de Alonso Emmanuel Cuevas, miembro activo de esta Iglesia y del Consejo de Administración por supuestos ilícitos que no han sido probados en ningún tribunal. La información contiene omisiones y confusiones inaceptables. Deseamos hacer públicas las siguientes informaciones:
2. El nombre de esta comunidad cristiana es Iglesia Cristiana de la Ciudad de México. Así lo ha sido desde su establecimiento hace 20 años. Contamos con una asistencia promedio de 800 personas por servicio dominical y no tenemos sucursales. Rechazamos que se nos confunda con otras organizaciones religiosas.
3. El Sr. Alonso Emmanuel Cuevas fue detenido el martes 19 de mayo de 2009 por la PGR sin orden de aprehensión. La detención se hizo de manera dolosa frente a su esposa e hijas menores de edad inmediatamente después de un culto. Nunca recibió un citatorio. Se le puso en libertad horas después luego de aplicarle un cuestionario religioso como si sus creencias fueran objeto de una inquisición judicial, lo que viola el Artículo 130 constitucional. La fiscal en turno se manifestó abiertamente católica e intolerante durante una diligencia oficial en representación de un estado laico.
4. El pasado martes 23 de junio el Sr. Cuevas fue detenido nuevamente por la PGR cuando acudió a apoyar moralmente a un matrimonio de la tercera edad de esta iglesia que era hostigado por agentes de la PGR en su domicilio particular. Existe constancia de ello. El Sr. Cuevas fue detenido en el acto de auxiliar como persona de confianza al matrimonio referido sin existir orden de arresto o de presentación. Fue llevado a la PGR e incomunicado e impedido de tener acceso a su abogado por 72 horas. Fue sometido a otro interrogatorio inquisitorial y tratos vejatorios. Estos hechos constan en las denuncias respectivas interpuestas el viernes 19 de junio y el martes 23 de junio de 2009, ante la CNDH con copia a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y Human Rights Watch.
5. El Sr. Cuevas ha declarado ser inocente de cualquier ilícito. Como represalia a su renuencia a “cooperar” con la PGR la fiscal en turno le amenazó con un arraigo, amenaza que cumplió ayer 27 de Junio. El Sr. Cuevas es un reo de conciencia del gobierno de Felipe Calderón. Es objeto de persecución religiosa por pertenecer a una minoría cristiana en México. Se le quieren colgar ilícitos que no ha cometido. La agresión de la PGR contra el Sr. Alonso Emmanuel Cuevas es una acción inaceptable retomando una larga cadena de actos discriminatorios, detenciones y cateos ilegales iniciados hace meses por la PGJDF contra algunos miembros de esta iglesia para justificar su ineficiencia.
6. Hacemos notar que el Sr. Alonso Emmanuel no ha sido consignado ante ningún juez, no tiene orden de aprehensión en su contra y no ha sido vencido en juicio. De acuerdo a la justicia es inocente hasta comprobarse lo contrario. Se le ha aplicado la figura jurídica del arraigo para denostarlo públicamente y por implicación a la iglesia a la que pertenece.
7. El Artículo 130 Constitucional garantiza la libertad de creencia de todos los mexicanos como un derecho. Tenemos derecho a un trato informativo imparcial. Rechazamos las calumnias y especulaciones que provocan discriminación contra esta iglesia que por confusión, o por el hecho de ser una opción cristiana minoritaria, se han generado.
8. Por último, a pesar de los intentos por intimidarnos y las agresiones del gobierno, la Iglesia Cristiana de la Ciudad de México continuará adelante con su labor pacífica de predicar y vivir el cristianismo según nuestra conciencia. Si predicar o ser cristiano ahora es un delito en nuestro país, van a tener que hacer la cárcel más grande para que quepamos todos. “Todos somos Alonso Cuevas”.
Atentamente
Iglesia Cristiana de la Ciudad de México
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